El aumento de las ciberestafas, o mejor conocidas como Phishing, es inevitable, todo ello consecuencia de la era digital en la que vivimos.
Ahora bien, a parte de las propias víctimas de dichas estafas, las personas estafadas, también tenemos otras víctimas.
Estamos hablando de las marcas, éstas pueden ver gravemente lesionada y perjudicada su reputación como consecuencia del uso y la suplantación por parte de los estafadores.
Por ello, vamos a comentar algunas de las marcas más conocidas que han sido víctimas del phishing.
- DHL
Actualmente, es la marca que más ha sido suplantada y que, probablemente, más estafados haya generado.

Como todos sabemos, DHL es una empresa de mensajería, que, normalmente, notifica a sus clientes vía SMS.
Este hecho ha sido aprovechado por infinidad de estafadores, con la intención de recabar datos de personas para, posteriormente, usarlos en propio beneficio o para la consecución de fines fraudulentos.
Normalmente, dicho mensaje conlleva la entrada en enlaces sospechosos que incluso pueden contener virus que dan completo acceso al dispositivo, siendo muy peligroso.
A pesar de ello, y por suerte, esta situación se ha hecho eco en todas las plataformas y, por ende, los ciudadanos han podido tener conocimiento de este tipo de conductas y protegerse de ellas.
- Mercadona
En el caso de la cadena de supermercados Mercadona, el phishing se intentó mediante la publicación de supuestas ofertas de trabajo, ofertas que aparecían sobre todo en redes sociales y SMS.
En este sentido, todas las ofertas eran completamente falsas, siendo el principal objetivo de los estafadores la captación de datos personales y, en su caso, datos confidenciales como pueden ser números de cuentas bancarias.
Ante eso, Mercadona supo reaccionar rápidamente, avisando por todas las redes sociales y medios que se trataba de una suplantación de la marca y de un intento de estafa.
- Amazon
Otra de las marcas más conocidas que ha sufrido suplantaciones de identidad ha sido Amazon.
En este caso, el phishing se centraba tanto en correos electrónicos como en SMS, los cuales contenían un enlace a través del cual solicitaban ciertos datos y que, en muchos casos, permitían obtener los datos necesarios para acceder a las cuentas de los clientes.
Ante estos casos, Amazon no dudo en poner en conocimiento de todos estos intentos de estafa, creando un apartado en su web que permite denunciar este tipo de conductas.
- Vueling
Por último, cabe mencionar el caso de Vueling, marca que también fue usada y suplantada para cometer ciberestafas.

Estas conductas consistían en ofertar vuelos gratuitos y pedían una serie de datos personales, siendo la intención de los estafadores recopilar este tipo de datos para, posteriormente, utilizarlos en intereses propios o fraudulentos.
Tanto Vueling como diferentes medios de comunicación enseguida consiguieron visibilizar este tipo de comportamientos.
¿CÓMO PUEDE AFECTAR EL PHISHING A LA REPUTACIÓN ONLINE DE LA MARCA?
Como bien hemos ido introduciendo, ya no solo se está suplantando una marca, conducta que puede constituir un claro delito de propiedad intelectual y/o industrial, sino que este tipo de comportamientos lesionan gravemente la reputación online de la misma.
Dicha lesión se centra en la pérdida de la confianza de los clientes con respecto a la marca en cuestión, confianza que es fundamental para cualquier negocio.
Asimismo, este tipo de conductas son denunciadas en diferentes plataformas y, en caso de no recibir una respuesta por parte de la marca, puede generarle una mala imagen y poca implicación con sus clientes.
¿CÓMO PODEMOS PROTEGER NUESTRA MARCA?
Además de reaccionar de forma rápida y eficaz ante este tipo de situaciones, conviene implementar algunas medidas preventivas.

Entre las más eficaces podemos destacar:
- Realización de listas de nombres falsos para configurarlas como Spam y bloquear los mensajes que puedan remitirnos. Esta medida evita que posibles hackers accedan a los sistemas de nuestro negocio y obtengan datos tanto personales como confidenciales, ya sea de clientes, socios, proveedores como de la propia empresa en sí.
- Registrar dominios parecidos al de nuestro negocio, así como aquellos que cuenten con errores ortográficos, abreviaturas u otras pequeñas variaciones, para que redirijan a los clientes a nuestro dominio web oficial. Esta medida reduce la posibilidad de que los estafadores puedan hacerse con un dominio parecido y engañen a la gente haciéndose pasar por tu negocio y/o marca.
Por tanto, todo negocio debe de estar preparado para afrontar este tipo de situaciones, no solo reaccionando ante ellas, sino también contando con medidas que, en la medida de lo posible, intenten prevenir y evitar cualquier suplantación de nuestra marca.